Un día en París siempre es una buena idea y más si vas de la mano de una selecta firma como es Azzedine Alaïa, así que acepté encantadísima su invitación y bien temprano por la mañana, me fui hacia el aeropuerto. Avión, llegada a París, cafe au lait en mi sitio habitual del aeropuerto de Orly mientras esperaba a mis compañeras Rebeca y Estefanía y luego emocionada rumbo hacia la boutique Azzedine Alaïa. Una vez allí, un buen desayuno y mi segundo café. La noche anterior tuve que quedarme trabajando así que agradecí mucho reponer fuerzas y degustar unos riquísimos macaroons.
La boutique, espectacular, sin palabras. Y el motivo de mi visita: conocer el nuevo perfume Alaïa Parfum. Es de los que tienen alma. E historia. Y esa historia te envuelve. Leerla aquí y luego probad a oler el perfume y me contáis 😉
Además de descubrir la fragancia, disfruté mucho escuchando historias del alma de la firma, sus reconocidas dotes culinarias y, en definitiva, pude soñar una vez más, como siempre que estoy en París. A veces los sueños se hacen realidad y esto no se queda aquí. Esa noche llegué a Barcelona a las 12 de la noche, la hora de Cenicienta, pero el cuento no acabó. Pronto veréis más. Un besito enorme y feliz semana.
Paris is always a good idea. Even better if you go with an exclusive brand as Azzedine Alaïa. Very excited as always I went to the airport early in the morning and arrived to Orly airport. Cafe au lait at my usual place while waiting for my girls Rebeca and Estefania, and then the driver took us to Azzedine Alaïa boutique in Paris. There, time for a delicious breakfast, my second coffee of the day and delicious macaroons.
The store is just incredible. No words. And the reason of my visit: they were launching the first fragrance of the brand: Alaïa Parfum. It is one of those that has soul and history and you can feel it. You can reed about it here ,then try the parfum and you’ll understand what I’m talking about.
Apart of discovering the perfum, I enjoyed listening stories of the brand and the designer, who is well known also for his cooking skills. Once more, I was dreaming in Paris. At midnight I was back in Barcelona, as Cinderella coming back to reality. But this is not the end of this fairy tale. Because some times dreams come true. And there’s more that you will see very soon. Kisses and have a lovely week.
I wore Gerard Darel jacket and blouse, Mango skirt, Deichmann shoes, Just Fab bag